Los enfermos de cáncer y sus familias a menudo tienen que afrontar situaciones muy complicadas. Para recibir tratamiento tienen que desplazarse lejos de su hogar y junto con el enfermo acude algún familiar para no dejarlo solo durante el proceso. Pero es duro estar día tras día en un hospital. Por eso, el trabajo del Voluntariado ayuda familias cancer Madrid es tan importante.

Estos voluntarios llevan a cabo talleres para que los enfermos y sus familias puedan sentirse un poco mejor y también para que su tiempo pase de una manera más amena. Por ejemplo, uno de los talleres con más éxito es el de elaboración de pelucas con cabello donado. Con la quimioterapia es fácil perder el cabello pero no todo el mundo puede permitirse el pagarse una peluca de pelo natural.

En estos talleres, se elaboran pelucas con cabello recogido en diferentes peluquerías y que es donado por los clientes. Estas pelucas son gratuitas para los enfermos los cuales, además, pueden participar en la elaboración de las mismas y aprender así cómo tienen que cuidarlas día a día. Muchos enfermos, cuando ya no necesitan la peluca, la devuelven para que otra persona pueda beneficiarse de ella.

La piel también se ve afectada por los tratamientos de quimioterapia y por eso voluntarios expertos en estética ofrecen a los enfermos cuidados específicos para su piel y les dan talleres para que sepan cómo llevar a cabo estos cuidados también en el hogar.

También hay talleres en los que se imparten clases de yoga por parte de voluntarios. Este ejercicio es muy completo y muy beneficioso para muchos enfermos y familiares, quienes combaten de este modo el estrés de una forma bastante efectiva.

Los enfermos reciben solidaridad, pero también pueden aportar su granito de arena ayudando a otras personas. Para esto está el taller de tejer mantas, en el cual enfermos y familiares pueden colaborar para tejer mantas que se quedan en el hospital para ser utilizadas por otras personas. Los participantes en el taller logran desconectar y se sienten bien al poder ayudar.

Incluso hay reparto de revistas y material de lectura por parte de voluntarios. Pero lo cierto es que además de todo esto pueden hacerse muchas otras actividades. Cualquiera que sepa hacer algo que puede ser apropiado puede ofrecerse para impartir talleres para los enfermos y sus familias haciéndoles la estancia en el hospital más llevadera.

Antes de que mi hijo empezase al colegio, siempre había desconfiado un poco de la labor de las asociaciones de padres de alumnos, pero cuando conocí cómo trabajaban en la del recién estrenado colegio de mi hija cambié totalmente de opinión. Tanto es así que en los dos últimos años me he implicado a fondo en la misma hasta convertirme en presidente.  

Mi cambio de perspectiva con respecto a la labor de las AMPAs empezó cuando se organizaron unas jornadas para concienciar sobre el cáncer. La asociación decidió colaborar cancer como colegio Madrid y se puso en contacto con un partner que los asesoró con información y materiales. Además enviaron dos expertos para dar unas charlas a padres y madres.

Siempre he estado muy interesado en todo lo relacionado con esta terrible enfermedad por circunstancias familiares así que aquella iniciativa me pareció muy interesante. Los alumnos más pequeños colaboraron en un mural sobre la enfermedad mientras que los más mayores participaron en un mercado solidario. También se organizó un pequeño torneo de fútbol solidario para papás y mamás que tuvo un éxito inesperado (yo mismo me calcé las botas de fútbol).

Todo esto fue hace tres años. Fueron las primeras jornadas de concienciación sobre el cáncer que se organizaron en el colegio. No lo dudé y me hice socio de la AMPA para colaborar activamente a partir de aquel momento. Cuando hace un año salí elegido como presidente supe que me encargaría de organizar las nuevas jornadas. El listón estaba muy alto y tuve algo de miedo.

El presidente saliente y sus colaboradores habían hecho un trabajo fantástico y no sabía si estaría a la altura. Pero me ayudaron en todo lo posible. Lo primero que hice fue ponerme en contacto con el partner para hacerle saber que este año también queríamos colaborar cancer como colegio Madrid. De nuevo todo fueron facilidades.

La novedad de este año fue una salida en bicicleta solidaria que, de nuevo, fue un éxito. Aunque no estoy seguro que todo saliera igual de bien que en años anteriores, me siento bien de haber colaborado en algo tan importante desde un punto de vista social.