Uno de los problemas más frecuentes en los bebés son las irritaciones que se producen debido al pañal. La piel de los niños es muy delicada porque todavía no ha creado las barreras protectoras que posee la piel de un niño crecido o de un adulto. Es por eso que son muy propensos a las alergias y que hay que tener mucho cuidado con los tejidos que se utilizan en contacto con su piel.
Aunque los pañales para bebés están cada vez más evolucionados no todos son iguales y no actúan del mismo modo para todos los niños. Un pañal perfecto para la piel de un bebé puede causarle irritaciones a otro y por eso hay que probar con varias marcas hasta encontrar aquel que mejor proteja al niño.
Cambiar el pañal con bastante frecuencia también ayuda a evitar las irritaciones porque se evita que el niño pueda tener la piel mojada. Incluso si el pañal es muy absorbente, el niño se moja al hacer pipí y queda húmedo hasta que lo asean.
Muchos padres, tras probar con diferentes pañales desechables acaban escogiendo los pañales ecológicos de algodón que se pueden lavar y reutilizar tantas veces como sea necesario. Los modelos actuales son muy cómodos y muy fáciles de usar y no tienen nada que ver con aquellos antiguos que había que sujetar con imperdibles.
La higiene es básica para solucionar la irritación del pañal, por eso es muy importante comprar cremitas específicas en la sección de parafarmacia bebe de establecimientos especializados. Estas cremas se aplican tras haber lavado al bebé y crean sobre su piel esa película protectora que hemos dicho que le falta.
Las toallitas higiénicas desechables no son la mejor idea. Pueden utilizase como último recurso cuando se está fuera de casa, pero pese a resultar tan prácticas para los padres no son tan buenas para el niño. Es mucho más adecuado limpiarle con una esponja natural ligeramente humedecida y un poco de jabón específico.
A continuación se le debe de secar muy bien con un pañito de algodón suave y aplicar la cremita protectora. También es buena idea que si la temperatura lo permite, el bebé esté sin pañal durante algún tiempo en casa. Se pueden colocar en la cuna protectores para que no se empape el colchón. Así la piel podrá estar al aire y curar mejor de todos esos sarpullidos y molestias.